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El caso del turista estadounidense que denunció que un sanatorio de Bariloche le cobró 944.000 pesos por reacomodar por accidente un hombro en su lugar, ya se encuentra en trámite en la Oficina Municipal de Defensa al Consumidor (Omiduc) y ya cuenta con fecha para la realización de una audiencia entre las partes involucradas.
El titular del área comunal, Lucas Jancovich, conversó con Radio Seis acerca de la denuncia que realizó un hombre proveniente de Pittsburgh, Estados Unidos, que decidió pasar algunos días en Bariloche, pero terminó regresando a su país con este trámite pendiente.
El funcionario dijo que el hombre llegó por sus propios medios a la guardia del Sanatorio San Carlos, ubicada en la base del cerro Catedral. Explicó que fue atendido por un médico y ratificó que el costo total por suministrarle pastillas para el dolor, reacomodar su hombro y algunas radiografías fue de 944.000 pesos.
Jancovich agregó que en la denuncia quedó expresado que el turista intentó pagar con su tarjeta de crédito pero que, por los topes financieros, no pudo saldar el total de la deuda. Pero también acusó que al día siguiente el médico que lo había atendido se presentó en el hostel en el que estaba y le exigió el pago del saldo “bajo amenaza de que no podría volver a su país si no pagaba la deuda”.
“El San Carlos está dando una versión distinta a lo ocurrido”, destacó acerca de la importancia de llevar a las dos partes a una audiencia que podría esclarecer lo ocurrido el pasado 4 de agosto.
El funcionario aclaró que el organismo municipal no posee facultades para determinar si corresponde el costo de las prácticas médicas pero dijo que, en primer lugar, se busca constatar que los precios están publicados y si al turista se le dio la oportunidad de aceptar o rechazar el pago por esa práctica médica.
Jancovich dijo que el turista podría ser considerado como “consumidor vulnerable” ya que se trata de un extranjero que no conoce sus derechos, no habla el idioma y que estaba en una situación desfavorable al momento de requerir atención médica.
Sin embargo, también se refirió a la posibilidad que existiera un precio diferenciado para las prácticas. Es que una vocera del sanatorio reconoció a este medio que los costos para los turistas nacionales son otros ya que se los benéfica con una “atención” en la facturación. Ante este planteo es que señaló que se analizará si existió un cambio en los costos “solo por ver la condición de este hombre y aprovecharse de él”.
El propio Jancovich estará en la audiencia por ser la única persona que se puede comunicar en inglés en la oficina municipal. Comentó además que por lo “especial” de este caso se decidió darle celeridad al trámite ya que semanalmente se reciben más de 20 denuncias.
El funcionario dijo que de confirmarse la existencia de precios diferenciados, entre turistas extranjeros y nacionales, se podría avanzar con una infracción y señaló también que se trataría de una maniobra inconstitucional.
“Me resulta de entrada difícil de creer que cualquier cosa que pueda suceder en una cuestión medica lo tengan exhibido”, señaló acerca de un elemento no menor que es la publicación de los costos de cada práctica antes de ser atendido por un especialista. Sin embargo no descarto que el sanatorio cuente con un nomenclador para las prepagas y obras sociales, de manera de enumerar las prácticas que se hacen en las guardias.
Fuente: Bariloche 2000, texto y foto
