Juan, de 30 años, que hasta hace poco tiempo estaba en situación de calle y solía dormir en un sector de la guardia del hospital de Viedma, vive ahora en una casa, pero en forma transitoria.
Muy poco afecto a contar su propia historia, Juan solo confirmó que “salí de situación de calle y ahora busco trabajo”.
Está viviendo en un lugar que le prestaron, pero necesita otro espacio, que pagará con su propio dinero.
Cuando lo encontramos, esta semana, comprobamos que ya no vende bolsas para residuos e insiste en su necesidad de tener trabajo.
Siempre, Juan camina junto con sus cinco perros (en rigor lo siguen a él).
Este joven no quiere dar su apellido, pero muchos lo conocen por su nombre y saben por donde anda cada día.