La leyenda sobre el tema asegura que la ciudad se llamaba Nuestra Señora de Talavera o Esteco, cuya riqueza y prosperidad es aún investigada por historiadores y arqueólogos debido que a pesar que sus habitantes disfrutaban de esa beneficiosa situación con el tiempo no les sirvió de mucho
Según afirma la narración, fue una ciudad colonial fundada en 1566 por los españoles cerca de El Vencido y más tarde fue trasladada y refundada con el nombre de Nuestra Señora de Talavera de Madrid, conservando el nombre de Esteco.
Precisamente sobre esta denominación, existe también una controversia, ya que algunos afirman que en la zona habitaban indios conocidos como “Estecos”, mientras que otros adjudican ese nombre a una deformación de “Esteros” existentes en el lugar, poblado por indios que vinculan a una etnia no conocida
Otros datos históricos de la región afirman que la población llegó a ser conocida como la ciudad maldita o “Sodoma” y “Gomorra”, donde buena parte de sus residentes disfrutaban de las riquezas, mientras otros padecían miserias.
La Leyenda pone de manifiesto a raíz de los hechos ocurridos allí que los mismos tienen carácter o posiblemente hayan sido un acontecimiento aleccionador, ya que de alguna manera advierte sobre las consecuencias a la que puede conducir la soberbia, la holganza y la mezquindad.
Cuando se hace referencia al tema se destaca que los habitantes de la población disponían de tantas riquezas, que hasta las herraduras de sus caballos eran de plata y además su conducta dejaba mucho que desear, ya que no eran demasiado afectos al trabajo, vagaban gran parte del día y menospreciaban a los más desfavorecidos
Siempre a estar por lo que nos indica la leyenda, cierto día, el sacerdote que convivía con los pobladores del lugar advirtió a sus habitantes que debían modificar sus conductas y actitudes, porque si no lo hacían Esteco podría sufrir graves consecuencias.
Adelantó el sacerdote que si no se producían modificaciones en las rutinas de la población, el clima los castigaría con violencia y advirtió al respecto que Esteco sufriría las consecuencias de un sismo o terremoto.
A pesar de la advertencia del religioso los habitantes de la población continuaron con sus cuestionados hábitos, poco después entonces se cumplió el vaticinio del religioso y un sismo destruyó el lugar.
Dicho suceso se produjo el 13 de septiembre de 1692 cuando el fenómeno borró del mapa la población dejándola atrapada en uno de los grandes mitos del sector.
La leyenda y el mito afirma que Dios castigó a los pobladores de Esteco por su vanidad, reduciendo a polvo la población, salvando entonces a la ciudad de Salta a raíz que los salteños sacaron un Cristo y una Virgen tallados en madera, oro y piedras preciosas que habían llegado desde España.
Se afirma por otra parte que este acontecimiento dio origen a la festividad del Señor y la Virgen del Milagro, que aún actualmente se sigue celebrando en Salta.
A todo esto, se sabe que hasta no hace mucho tiempo,
antropólogos, historiadores y especialistas trabajaban en la región con el propósito de hallar, elementos o datos que aporten cierta veracidad a los interrogantes que plantean la leyenda y mitos sobre esa ciudad, de los que no muchos se animaban hablar, desconociéndose las razones.
En otro orden, muchos estudiosos centran sus investigaciones vinculadas con la leyenda y el mito, en los motivos que provocaron el traslado de la primitiva ciudad, que según sostienen algunos guardaría el secreto de esta misteriosa historia.
Texto: Eduardo Reyes, escritor y periodista de Viedma
Las Grutas – Río Negro