Un día me dirigía a un campo a trabajar cuando de repente, diviso una tropa que iba al paso, lento y sin apuro.
Me voy arrimando despacito hasta llegar a la cola del desfile vacuno.
Bajo el vidrio de la camioneta y le digo buenas tardes al arriero.
Generosamente y enseguida me respondió, buenas tardes Don, disculpe la demora, pero vamos despacito porque la hacienda está media flacona.
Enseguida entablamos una conversación fluida, primero y como corresponde presentarse cada uno y a Dios gracias, por ser veterinario enseguida la charla se puso entretenida.
En 20 minutos pasamos por todos los temas, falta de pasto, cuando va a llover, los precios de los insumos, la importancia de un plan sanitario, el valor de la carne, las pariciones, lo lindo del campo, renegar con los políticos, pero por, sobre todo, la importancia de seguir adelante y no aflojar.
La persona con la que hablé no era ni el peón, ni un mensual, ni una persona contratada por el día. ¿Saben quién era? El dueño de las vacas!!! El chacarero!!!
Cuidando sus animales, tranqueando de a pie 10 km para que tengan mejor comida y condiciones!!! Ese chacarero no cobra el IFE ni plan social alguno, paga sus impuestos y trabaja como un burro los fines de semana para prosperar!!
No me vengan que en este país no hay oportunidades, acá lo importante es agachar el lomo, trabajar, apoyarse en su familia y defender sus derechos! Por eso, si no trabajaste nunca en el campo y no tenés idea del mismo, por favor no opines de gusto y lo trates de oligarca. La próxima, si ves a alguien de a caballo, arriba de un tractor o camioneta en los campos, saludalo, tocale bocina, porque ellos hacen patria todo el año! Es amor a nuestro suelo, amor a nuestros antepasados, es una pasión!
Argentina, no me aflojes!!!!
Texto: Fa Martínez (en Facebook)