Policías de la Brigada Rural de General Conesa, en control de rutina el sábado 23 en rutas 53 y 251, procedieron a la inspección de dos pickup Toyota hilux, encontrando armas con la documentación correspondiente y bolsas con carne que, según manifestaron los individuos a bordo, se trataba de cuatro ñandues.
Ante la situación se dio intervención a la fiscal de turno de Viedma, Mariana Giamonna, quien dispuso se inicie causa penal por infracción a la ley de fauna N° 22.421, que tipifica la caza furtiva como delito, además de la detención de las personas, secuestro de vehículos, armas y otros elementos involucrados en la actividad.
“Desde esta Secretaría (de Ambiente y Cambio Climático) queremos destacar el accionar de la Policía de Río Negro, especialmente las Unidades Especiales como Brigadas Rurales, Policía Montada y Cuerpos de Seguridad Vial, que permanecen atentos en rutas y caminos, trabajando con la mayor profesionalidad a la hora de detectar acciones de caza furtiva, un verdadero problema que afecta la biodiversidad rionegrina, atentando contra el bienestar y equilibrio de los ecosistemas, por lo tanto de la salud pública de todos”, resaltó el organismo en un comunicado difundido a través de su página de Facebook.