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Cuatro rionegrinos pasaron a integrar la corta lista de conductores de máquinas a vapor en Argentina, cumpliendo con la necesidad de formar profesionales para que La Trochita pueda seguir funcionando, desde el año pasado, a lo largo de viajes programados de 43 kilómetros para unir Ingeniero Jacobacci y Ojos de Agua.
A bordo de La Trochita, cuatro maquinistas del Tren Patagónico culminaron el curso de conductores de locomotoras a vapor dictado por especialistas de la empresa estatal rionegrina y de la Comisión Nacional Reguladora del Transporte (CNRT).
“Con la intención de transmitir un viejo legado a las nuevas generaciones, la actividad contó con una importante participación de tres conductores del legendario tren que están a poco tiempo de jubilarse”, explicaron voceros oficiales.
La capacitación, que comenzó en diciembre de 2018, tuvo una instancia de examen escrito, oral y práctico a bordo de La Trochita en el que los flamantes conductores se alternaron el manejo de la locomotora, recibieron diversas instrucciones de los capacitadores y profundizaron en aspectos técnicos de la misma.
“Hace 32 años que no se brindaba un curso de este tipo ya que se trata de un oficio en desuso, pero con la recuperación y posterior reactivación del tren de trocha angosta por parte del gobierno de Río Negro, en septiembre del año pasado, se tornó necesario capacitar a nuevos conductores para este tipo de maquinarias”, destacaron.
Además de los cuatro maquinistas del Tren Patagónico, participaron de la actividad dos inspectores examinadores nacionales de la CNRT y dos de la escuela técnica central del sindicato La Fraternidad. Para el examen final se acudió a un inspector nacional retirado de la CNRT con conocimiento en maquinarias a vapor ya que no había ninguno en actividad.
Desde 2018 el legendario tren realiza viajes programados de 43 kilómetros para unir Ingeniero Jacobacci y Ojos de Agua. Durante el trayecto cumple un importante rol al poner en valor la riqueza natural rionegrina, así como también las formas de vivir, costumbres, comidas típicas y artesanías de cada uno de los lugares que recorre.
La formación, que actualmente está compuesta por una locomotora, tres vagones de pasajeros, un coche motor y un furgón (con capacidad para trasladar 120 personas), constituye en sí misma un museo andante, ya que su estructura y las vías por las que circula datan del año 1922.
