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A través del decreto N°57, emitido el 26 de enero y oficialmente difundido este jueves, el Gobierno de Río Negro dejó sin efecto la designación de la dirigente sindical Virginia Susana Campisi en la función de delegada zonal de Trabajo de la ciudad de Viedma, dependiente de la Secretaría de Trabajo.
El escueto documento oficial contrasta con la extensa polémica derivada del accionar de la ex funcionaria laboral
En setiembre del año pasado, la entonces secretaria general de UTEDyC asumió la titularidad de la Delegación del Valle Inferior de la Secretaría de Trabajo. La gremialista señaló críticas hacia el anterior delegado, Mario Riquelme. “Prácticamente no estaba, entonces el empleado hacia lo que le parecía y no es así”, dijo.
Campisi manifestó que “conforme los lineamientos que me ha bajado la plana política, que va desde el gobernador hasta el secretario de Trabajo, es lograr una gestión de cambio, priorizando honestidad y eficiencia”.
En octubre, trabajadores de la Delegación Zonal de Trabajo Viedma denunciaron públicamente que “la nueva funcionaria, a cargo de la Delegación, maltrata empleados”.
Señalaron que “venimos sufriendo todo tipo de humillaciones y amenazas por parte de la actual delegada de Trabajo y hasta el momento no encontramos la solución a esta grave situación”.
Las expresiones fueron conocidas después de una audiencia en la Secretaria de Trabajo en Viedma donde fueron atendidos por el secretario laboral y ex referente de la UCR Lucas Pica, quien prometió “una inmediata respuesta”, según dijeron los propios trabajadores, que reclamaron la remoción de Campisi.
El 3 de ese mismo mes, se conoció que secretarios generales gremios de la Zona Atlántica se solidarizaron con los trabajadores de la Delegación de Trabajo de Viedma “quienes vienen sufriendo un constante estado de incertidumbre y estrés laboral, habida cuenta de los sucesos que son de público conocimiento y las denuncias presentadas ante la Secretaría de Trabajo de la provincia de Río Negro”.
“Los sindicatos hemos tomado la firme decisión de no aceptar bajo ningún punto de vista el regreso de Virginia Campisi al frente de este organismo, temiendo por la integridad emocional y física de los trabajadores”, indicaron los gremialistas.
También consignaron en un comunicado que “no podemos pasar por alto el reclamo de los trabajadores y permitir sin más que se los maltrate, se los amenace, se los tilde de vagos y corruptos y se ponga en jaque su estado de salud emocional, que su buen nombre y honor se vea afectado livianamente ante la sociedad, sin tener ningún sustento jurídico que así lo compruebe”.
Casi dos meses antes, Campisi se defendió de la denuncia sobre maltrato y acoso laboral presentada por un grupo de empleados de ese organismo y aseguró que “se trata de una “movida” en su contra y apuntó al entonces dirigente bancario y actual legislador Rodolfo Cufré y a su antecesor en cargo laboral, Mario Riquelme.
“A mí, el gobernador Weretilneck y el secretario Pica me pidieron honestidad. Y acá están acostumbrados a moverse en un ambiente de vagancia y de corrupción”, dijo la ahora ex funcionaria a LU15.
“No es posible que algunos, no todos, porque son unos cuatro o cinco trabajadores, se enojen porque les haya dicho que tenían que trabajar; están todo el día tomando mate, no quieren que yo les dé órdenes, que les diga que atiendan bien a la gente o que cumplan el horario”, remarcó Campisi.
