La sargento Gisella Epul, el oficial subinspector Rodrigo Luna, la oficial subinspector Yanina Ibáñez y la agente Micaela Marín, de la Comisaría 59º del barrio San Martín de Viedma, salvaron la vida de un niño de tres años que había llegado desvanecido a esa unidad. Los padres del pequeño acudieron solicitando ayuda para su hijo.
El niño, en estado crítico, se encontraba ahogado con comida y vómito, sin poder respirar. Los efectivos aplicaron los primeros auxilios, de manera inmediata.
Con conocimientos en maniobras de respiración cardiopulmonar, el equipo policial trabajó de manera coordinada, aplicando las técnicas necesarias para revivir al pequeño. La ráfaga de maniobras de RCP fue acompañada por la comunicación constante con médicos y enfermeras del Sistema Integral de Atención Rionegrina de Medicina de Emergencias (SIARME), que fueron desplazados hacia la Comisaría para brindar asistencia médica adicional.
Una vez que el menor fue estabilizado, fue trasladado de urgencia al hospital Artémides Zatti, donde recibió atención médica especializada.
“La rápida y efectiva acción de los agentes de la Comisaría 59º fue fundamental para salvar la vida del niño, cuya salud se encuentra fuera de peligro gracias al labor de la Policía”, destacaron fuetes oficiales.
“La historia de la noche del domingo en Viedma es un recordatorio de la importancia de contar con agentes de policía capacitados y comprometidos, dispuestos a poner en riesgo su propia vida para salvar la de los demás. La Policía de Río Negro no solo cumplió con su deber, sino que demostró una vez más su vocación de servicio y su dedicación inquebrantable por proteger y salvar vidas en la comunidad”, agregaron.
Fuente: Prensa Gobierno de RN