La historia de María Elena Massa es una de muchas en Río Negro de personas que se jubilaron momentos antes y en plena pandemia, pero lejos de pensar en descansar volvieron y están ayudando en la batalla contra el Covid-19.
Antes de jubilarse, María Elena, Licenciada en Enfermería, le prometió a la jefa de vacunación que, pese a estar sin actividad, cuando llegara la vacuna contra el Covid-19 volvería para estar en la primera línea de vacunación de Cinco Saltos y la región.
“Cuando comenzó la campaña de vacunación, no dudé en ofrecerme para acompañar, para ayudar y dar una mano, porque sé que la vacuna es la única que nos puede salvar de la pandemia”, relató María Elena, quien agregó que le prometió a Chavela, jefa de Vacunación, que ni bien esté inoculada volvería para ayudar: “Apenas me vacuné fui al vacunatorio para ayudar”, dijo.
Sostuvo que al finalizar las jornadas de inoculación, llega a su casa muy cansada porque nunca había vacunado a tantas personas en su vida, ni siquiera en sus épocas de enfermera inoculando en Cinco Saltos y la región.
Además, en esta ambigüedad entre la felicidad por vacunar a personas y el cansancio por el trabajo, María Elena sostiene: “Me pongo feliz de vacunar, porque mi tiempo no está perdido y de alguna forma estamos combatiendo al coronavirus que vino a alterarnos la vida” y agregó que finaliza sus días cansada, pero feliz.
Fuente: Prensa Casa de Río Negro