La provincia de Río Negro tiene más de 30 inspectores que controlan comercios para evitar el aumento desmedido de los precios, el acopio y la venta de productos ilegales. La tarea la realizan en medio de la emergencia por la pandemia de coronavirus o COVID-19,
A mediados de marzo, cuando se
iniciaron los operativos, se realizaban con 16 agentes. Actualmente ya son más
de 30 quienes verifican los comercios, optimizando los resultados, mencionaron
este lunes fuentes oficiales.
Las recorridas son realizadas por personal de la Agencia de Recaudación,
algunos de la planta permanente de inspectores y otros agentes administrativos,
que desde el primer día se comprometieron a controlar y fiscalizar los
comercios para evitar el abuso de precios en una situación de extrema necesidad
como la que se vive en todo el país. A ellos se sumaron empleados municipales.
“Son rionegrinos que, en pleno aislamiento social, preventivo y obligatorio,
realizan esta tarea para proteger al resto de los ciudadanos de la provincia,
controlando precios pero también sacando de la venta productos vencidos o sin
autorización legal”.
“Los inspectores no solo se enfrentan al riesgo sanitario, sino también a
inconvenientes con algunos comerciantes que reaccionan de manera violenta y
atentan contra su integridad física”.
Fuente: Prensa Casa de Gobierno de Río Negro