El puente ferrocarretero y peatonal que une Viedma y Carmen de Patagones, inaugurado en el año 1931 y puesto en valor nuevamente en diciembre de 2013, está actualmente muy sucio y esa situación se observa más en la pasarela,construida hace poco más de cuatro años.
Se puede ver tierra y restos de defecación de palomas en la pasarela y también en los bordes del puente, que tiene 268 metros de longitud.
La refuncionalización de la formidable estructura, de tecnología alemana y única en el mundo, insumió un presupuesto de más de $24.000.000, financiados en el año 2013 por el Gobierno nacional, según estimaciones oficiales.
Por la inversión que generó el reciente arreglo del puente –de permanente utilización por miles de automovilistas- es relevante que el mantenimiento se extienda a su limpieza. Más aún cuando la pasarela es usada por cientos de peatones, todos los días, mucho más en pleno verano.
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